Contemplar el mar

Fotografía por: Paula Verdugo Orgaz

Me encanta pasear por las callejuelas del casco antiguo de Barcelona. Perderme en ellas y descubrir olores, imágenes, sensaciones y gentes totalmente diferentes a lo habitual. Ver las macetas con flores de todo tipo y colores colgando de esos balcones de hierro forjado de hace ya algunas décadas. La ropa tendida sobre tu cabeza filtrando los pocos rayos de sol que entran entre esas dos estrechas paredes. El suelo, los muros, los tejados, todo es diferente. Es como trasladarse a la Barcelona de hace algún siglo. Recorrer patinando su casco antiguo.

Sentarse en un espigón a contemplar como el mar azota las rocas de granito con tal fuerza que este las rompa en miles de gotitas que empapan cada rincón y mojan mi cara. Sentir el viento fresco deslizarse sobre mi como sí de un elemento natural tratase. Y en ese momento, en que las gotas arrastradas por el viento mojan mi cara, pienso en ti y sonrío. Sé que disfrutarías estando aquí conmigo. Se que te encanta contemplar el mar mientras compartimos cascos y suena...

Niña imantada - Love of Lesbian