miércoles, 21 de marzo de 2012

Días de lluvia



Se aísla en el silencio, se esconde entre las hojas y camufla sus lagrimas con las gotas que caen hoy en esta rara primavera. Pasa desapercibido entre el mogollón de gentes que corren arriba y abajo. Entre la prisa, su “stop”. Aguarda y con mirada incierta no deja de observar sus zapatos rojos mojarse. Gota a gota. Parece que fuesen a disolverse entre el agua que se escurre hasta la alcantarilla. Rojos los sueños, las ilusiones y la alegría. Será una buena forma de acabar el día ¿no?. De repente, suena su móvil. Las gentes desaparecen, las nubes se van y las gotas se volatilizan. Es él. Pero al poco, se aísla en el silencio, se esconde entre las hojas y camufla sus lagrimas con la lluvia que vuelve a caer sobre sus zapatos rojos. Parece que hoy no es el día…

Será mejor desaparecer de este mogollón de gentes sin sentido y resguardarme de la lluvia. La oscuridad parece la solución. Y así, volvió a su cama, cerró los ojos y en su reproductor, queda “del invierno”.

Adiós petit, peixet blanc, descansa