Canciones atípicas y raras para los osos de Singapur

Soplo bien fuerte para desempolvar el baúl donde guardo las emociones y sentimientos más bonitos y frágiles que tengo. Antes de abrirlo, reflexiono. Pienso y siento, que en este momento, no se volverán a romper como hicieron en ocasiones anteriores, se que los cuidarás y mimarás como si de algo tuyo se tratase. Al abrir ese baúl cojo con mis manos, el sentimiento tan bonito que al momento se transforma en mariposas que revolotean por toda la alacena donde me escondo a veces, y de golpe todas me atraviesan provocando que sonría, como hacia tiempo que no lo hacia. Las emociones, las miro con recelo, distante, pensativo y las cojo, las bebo, y tiro la botella al rio.

Así vuelvo a convertirme en el ser tan extremadamente sensible que soy. Ahora ya, vuelvo a ser capaz de querer, de mirar fijamente y de esperar ese beso que será correspondido.

I de golpe, como si en un remolino entrase, todo empieza a girar. Cambiando de color, pasando del gris, del blanco y negro, al más vivo color. Todo se ve muy diferente. Todo vuelve a vibrar. Entonces por un momento, me hayo en un agujero de la red espacio-tiempo y todo es atemporal, donde el espacio es infinito, y tus besos eternos.

Caigo al suelo. Entonces pienso. Recuerdo. Es tu mirada, tu sonrisa, tu cara, tus labios, tus manos, tus gestos, tu mensajes, tus llamadas, tus fotos con tu blackberry, los susurros en la noche, las palabras bonitas, tu modestia, tu sentir, tus preocupaciones y emociones, tu forma de ver el mundo, tus grandes y pequeños detalles, desde tu hola hasta tu adiós, tu pelo, tu sinceridad y tu.

Tu: conjunto de sensaciones y emociones que puede secar océanos y mover montañas con simplemente sonreír.

Ahora, llegará el tedioso y largo lunes, y con él, sus hermanos martes y miércoles, pero el jueves será distinto. Las estrellas se alinearán como no lo hicieron hasta ahora y crearan una atmosfera tan especial, que juntos caeremos en ese espacio atemporal donde nuestros besos y abrazos serán eternos para siempre, como tu, y como yo, en un conjunto cerrado en el espacio más abierto.